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Por qué es importante gestionar el miedo y la frustración

A medida que nos hacemos mayores, nuestro cerebro evoluciona para entender las situaciones de forma diferente a como lo hacen los jóvenes. Aquí se aplicaría el viejo dicho «es mejor haber aprendido a nadar en aguas tranquilas que haber crecido en un océano agitado». Somos más propensos a experimentar ansiedad cuando nos encontramos en una situación cargada emocionalmente. La ansiedad también puede aparecer cuando nos encontramos en una situación físicamente exigente, como cuando nos entrenamos para una carrera o un evento laboral. Teniendo en cuenta estos factores, es importante controlar la ansiedad para no pensar en exceso ni desarrollar una «respuesta de miedo» que no se pueda controlar. De este modo, podrás centrarte en lo que ocurre en el momento y no preocuparte por lo que pueda ocurrir en el futuro.

beneficios de los ejercicios para reducir la ansiedad

Se pueden enseñar muchas habilidades para reducir la ansiedad. Por ejemplo, se ha demostrado que los ejercicios de respiración conocidos como meditación de atención plena reducen la ansiedad. También se ha demostrado que la meditación mejora el sueño y reduce los síntomas del insomnio. Se ha demostrado que la meditación mejora el sueño y reduce los síntomas del insomnio. También puede utilizarse para reducir los niveles de estrés. Ejercitar el cerebro también puede ser útil para las personas con trastornos de ansiedad. Por ejemplo, la terapia cognitivo-conductual, que se centra en cambiar la forma de pensar, ha demostrado mejorar la ansiedad en personas con trastornos de ansiedad.

métodos para controlar el miedo y la frustración

Hay muchas formas de gestionar la frustración. Una de ellas es practicar la autocompasión. Esto significa prestar atención a lo que uno se dice a sí mismo para saber lo que debe desaparecer. Esto puede incluir cosas como: «Soy un fracaso»; «Esto no es lo suficientemente bueno»; «Así no es como quiero ser»; y «Así es como debería hacerlo». También puedes practicar mirando la situación desde el punto de vista de otra persona, lo que puede ayudarte a imaginarte también el punto de vista de la otra persona. Esto puede ayudarte a imaginarte mejor el punto de vista de la otra persona porque tendrás una mejor idea de cómo quiere ser percibida. Céntrate en lo que te gusta en lugar de en lo que no te gusta. Por ejemplo, si siempre hablas negativamente de tu pareja, lo más probable es que ella también experimente pensamientos negativos. Aunque esto no es una buena idea, es una elección que puedes hacer y que no tiene por qué ser perfecta.

Conclusión

La ansiedad crónica es normal. Le ocurre a la gente cuando se enfrenta a situaciones nuevas o se enfrenta a una situación en la que se encuentra a menudo. La clave está en aprender a controlarla. Esto te ayudará a evitar tener una «respuesta de miedo» que no puedes controlar. Además, te ayudará a evitar pensar demasiado o desarrollar una «respuesta de miedo» que no puedas controlar. Recuerda, el estrés forma parte de la vida y puedes controlarlo si quieres. La clave está en gestionarlo para no pensar en exceso ni desarrollar una «respuesta de miedo» que no puedas controlar. Y la mejor forma de hacerlo es con un programa de control de la ansiedad.

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