El mundo del ciclismo cambia constantemente a medida que surgen nuevas tecnologías y hábitos. Ahora tenemos esquiadores de fondo, tenistas y corredores de maratón que montan en bicicleta de montaña por diversión. Otros ciclistas adoptan una mentalidad más competitiva, corren maratones o se entrenan durante temporadas que van mucho más allá de su vida natural. Hay muchos factores que diferencian a un ciclista de otro, como la edad, la forma física y el nivel de entrenamiento. Pero, ¿cuál es el secreto para sacar el máximo partido al ciclismo? Con tantos consejos y trucos disponibles, ¿en qué consiste una estrategia eficaz? Explorémoslo.
Familiarizate con tus accesorios para bicicleta
El equipamiento es mucho más que una bicicleta o un par de zapatillas. Abarca la ropa, el casco, los guantes y mucho más. El casco de ciclismo adecuado puede ayudarte con la protección contra impactos, pero también tienes que cuidar tus partes naturales. Asegúrate de conocer tu equipamiento ciclista y de llevarlo siempre puesto. Aquí tienes algunas cosas que debes tener en cuenta:
- Las bicicletas de carretera no deben cogerse en cuestas ni en otros lugares peligrosos.
- Condúcelas siempre despacio y con control.
- Lleva siempre guantes cuando vayas cuesta abajo porque la suciedad y la nieve son un peligro potencial.
- No lleves el casco cuando corras o hagas footing porque estas actividades también pueden ser peligrosas.
Camina
Esto se explica por sí mismo. Vete andando. Claro que puedes ir al trabajo o al supermercado en bicicleta, pero si lo haces tendrás menos tiempo para hacer recados y menos energía para hacer el trabajo pesado. En lugar de eso, ve en bici al trabajo o al supermercado todos los días. Vete andando y luego vuelve a la bici para las actividades del día siguiente. Tu cuerpo te lo agradecerá.
Tómatelo con calma
El ciclismo es un deporte muy activo, así que tómatelo con calma. Los ciclistas suelen pasar entre tres y cinco horas al día sobre la bicicleta, mientras que para practicar otros deportes se necesitan entre una y tres horas. Tomarse su tiempo, incluso en los recorridos más difíciles, permitirá que su cuerpo se relaje y disponga de más tiempo para trabajar la forma física y el nivel de forma.
Conoce tus lesiones
Los ciclistas tienen mucho que superar si se lesionan o enferman durante la marcha. Sin embargo, puedes reducir el dolor y las molestias de tus salidas con la atención médica adecuada.
No vayas demasiado rápido
A los ciclistas les encanta tomar las rutas directas más pintorescas, pero ésta no es la mejor manera de hacerlo. Las investigaciones demuestran que la velocidad media de los ciclistas es de unos 40 km/h, y eso sin ni siquiera hacer un alto para el semáforo o una pausa para aparcar. Si circulas a una velocidad que no es adecuada para ti, o si vas sentado junto a alguien que podría sufrir una pérdida de visión u otros problemas oculares, considera la posibilidad de reducir un poco la velocidad o el ritmo.
Conduce con corazón
Los ciclistas no corren, sino que viajan. El ritmo cardíaco es el ritmo al que bombea el corazón, y es el mismo ritmo al que también lo hace el estómago. Es importante hacer todo lo posible por mantener la frecuencia cardiaca por encima de 100 lpm. Es importante ser consciente de la frecuencia con la que se acelera el corazón y de cómo se puede reducir.
La bicicleta es para toda la vida
El ciclismo no es para toda la vida. Todo el entrenamiento, los kilómetros sobre la bicicleta, el equipamiento y el hecho de que sea un deporte se unen para hacer de un ciclista un buen candidato para un trasplante de corazón. La Asociación Americana del Corazón recomienda que las personas menores de 26 años no se suban a la bicicleta porque son demasiado mayores para un trasplante de corazón y pueden no ser capaces de soportar velocidades y cuestas. Sin embargo, el cardiólogo de su centro de atención primaria debería poder poner fin a los trasplantes de corazón cuando empiecen a causar problemas. #¡Las bicis también son para los niños! Los niños no deberían montar mucho en bici. Es divertido, pero deben tener cuidado. Es divertido porque viajan y se entrenan, pero si no tienen cuidado, pueden acabar haciéndose daño o matándose. Es importante pedalear despacio con tu hijo a cuestas para que no apriete demasiado las rodillas. Deja siempre que abran el grifo del agua si no están usando la bicicleta para lavarse de forma sincronizada, o al menos deja que usen el grifo en la misma dirección en la que están usando la bicicleta.